Pedro llega al programa dispuesto a intentar conquistar, una vez más, a una tronista. Esta vez se ha fijado en Maira, pero Violeta ha puesto en duda las intenciones de su expretendiente y ha advertido a Maira de que el chico la llamaba fea hace tan sólo dos meses.
Sin embargo, Maira no parece haber hecho caso a Violeta y ha contraatacado: "No me importa, Violeta es pasado y yo ahora soy presente". Además, la tronista está encantada con Pedro porque ya había reconocido que le gustaría que fuese a pretenderla.